El Pato a la Pekín es uno de los platos más icónicos de la cocina china, conocido por su piel crujiente y carne jugosa. Este manjar, que se remonta a la dinastía Ming, ha sido apreciado por emperadores y plebeyos por igual, y sigue siendo un favorito en todo el mundo. A continuación, te ofrecemos una guía completa para preparar este exquisito plato en casa, incluyendo su historia, ingredientes esenciales y una receta detallada.
Ingredientes Esenciales
Para preparar un auténtico Pato a la Pekín, es esencial contar con ingredientes frescos y seguir cuidadosamente los pasos de la receta. Aquí tienes la lista de ingredientes necesarios:
Para el Pato:
1 pato entero (aproximadamente 2-3 kg)
2 litros de agua
1/2 taza de miel
1/2 taza de vinagre de arroz
1/4 taza de salsa de soja
2 cucharadas de jengibre fresco rallado
2 cucharadas de sal
Para el Marinado:
1/4 taza de salsa hoisin
2 cucharadas de miel
2 cucharadas de salsa de soja
1 cucharada de vino de arroz o vino blanco seco
1 cucharadita de cinco especias chinas
Para Servir:
Tortillas de harina finas o panqueques chinos
Pepino cortado en tiras finas
Cebollín cortado en tiras finas
Salsa hoisin adicional
Instrucciones:
Preparación del Pato:
Limpia el pato, eliminando cualquier pluma restante y exceso de grasa.
Seca el pato con papel de cocina y haz pequeños pinchazos en la piel para que pueda escurrir la grasa durante la cocción.
Llena una olla grande con 2 litros de agua y añade la miel, el vinagre de arroz, la salsa de soja, el jengibre y la sal. Lleva la mezcla a ebullición.
Escaldado del Pato:
Sostén el pato con cuidado sobre la olla y vierte la mezcla hirviendo sobre el pato, asegurándote de cubrirlo completamente. Esto ayuda a tensar la piel.
Deja escurrir el pato y cuélgalo en un lugar fresco y ventilado durante al menos 4 horas, o hasta toda la noche, para que la piel se seque completamente.
Marinado del Pato:
Mezcla todos los ingredientes del marinado en un bol.
Frota el marinado sobre el pato, asegurándote de cubrir toda la superficie. Deja reposar durante 30 minutos.
Cocción del Pato:
Precalienta el horno a 200°C.
Coloca el pato en una rejilla sobre una bandeja para hornear para permitir que la grasa gotee.
Asa el pato durante 30 minutos a 200°C, luego reduce la temperatura a 160°C y continúa asando durante 1 hora y 30 minutos, o hasta que la piel esté dorada y crujiente.
Durante la cocción, vierte ocasionalmente los jugos de la bandeja sobre el pato para mantener la piel crujiente.
Preparación de las Tortillas:
Mientras el pato se asa, prepara las tortillas de harina o panqueques chinos calentándolos en una sartén.
Mantén las tortillas calientes hasta que estén listas para servir.
Preparación de las Verduras:
Corta el pepino y el cebollín en tiras finas y colócalos en un plato para servir.
Servir el Pato:
Una vez cocido, deja reposar el pato durante 10 minutos antes de cortarlo.
Corta el pato en trozos pequeños, asegurándote de incluir un poco de piel crujiente en cada porción.
Sirve el pato con las tortillas calientes, las tiras de pepino y cebollín, y la salsa hoisin adicional.
Consejos para un Pato a la Pekín Perfecto
Secado de la Piel: Asegúrate de que la piel del pato esté completamente seca antes de asarlo. Esto es crucial para obtener una piel crujiente.
Temperatura del Horno: Ajusta la temperatura del horno según sea necesario para asegurar que el pato se cocine uniformemente y la piel se dore adecuadamente.
Corte del Pato: Utiliza un cuchillo afilado para cortar el pato en trozos finos. Esto asegura que cada bocado tenga la cantidad perfecta de carne y piel.
Variaciones del Pato a la Pekín
Aunque la receta tradicional es la más apreciada, hay algunas variaciones que puedes probar:
Pato a la Pekín con Salsa de Ciruela: Añade una salsa de ciruela en lugar de la salsa hoisin para un sabor diferente pero igualmente delicioso.
Pato a la Pekín Estilo Szechuan: Incorpora especias Szechuan para un toque picante y aromático.
Acompañamientos y Bebidas
El Pato a la Pekín se disfruta mejor con algunos acompañamientos tradicionales y bebidas que complementen sus sabores ricos y ahumados:
Arroz Frito: Un acompañamiento clásico que equilibra los sabores del pato.
Ensalada de Pepino y Sésamo: Aporta frescura y un contraste crujiente.
Té de Jazmín: Un té ligero y fragante que limpia el paladar entre bocados.
Para las bebidas, una cerveza ligera o un vino blanco seco son excelentes opciones para acompañar el Pato a la Pekín.
Conclusión
Preparar Pato a la Pekín en casa puede parecer una tarea desafiante, pero con los ingredientes correctos y siguiendo estos pasos, puedes recrear este icónico plato chino con éxito. La clave está en la preparación cuidadosa y la paciencia para asegurar que la piel quede crujiente y la carne jugosa. Este plato no solo es delicioso, sino que también ofrece una experiencia culinaria rica en historia y tradición. ¡Disfruta de tu Pato a la Pekín casero y sorprende a tus invitados con esta delicia oriental!
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